Telesforo y las enfermeras

Telesforo y las enfermeras

(por Anton Reina, #enfermerajipi)

Revisar la historia pasada sirve para cuestionar conceptos, ideas y creencias actuales. Mi querida compañera Mercedes, @MercedesLpezPr, enfermera asistencial y doctora en Historia Antigua, es también profesora asociada en la Universidad de Murcia. Gracias a que compartimos trabajo y trayecto durante años, tuve el privilegio de conocer sus investigaciones sobre mujer y salud en la historia antigua. Ha sido un honor coincidir contigo, saber de tus inquietudes y leer alguno de tus trabajos. Sin duda, una de las experiencias más estimulantes que he vivido en aquella unidad de farmacia hospitalaria. Pura inspiración personal, profesional y académica.

Las humanidades nos ayudan a ser (más humanos). Están relacionadas con la cultura. Nos ayudan a actuar. A decidir. A integrar valores. A que nuestros actos sean coherentes. La filosofía enriquece a la ciencia. El arte complementa a la tecnología. La historia nos descubre que en el futuro tal vez no estudiemos ciencias o letras, sino todo junto o todo lo contrario. La historia nos descubre realidades paralelas que ignoramos. Tal vez su estudio nos ayude a entender cómo mejorar nuestros hospitales y centros de salud. Tal vez mirando atrás podamos mejorar aspectos relacionados con la salud, la enfermedad, los lugares de culto, la mitología y la curación. Incluso mejorar ciertos aspectos de nuestro sistema sanitario.

Sobre templos para enfermos y santuarios-hospitales. En Asia greco-romana, por ejemplo, se construyeron grandes lugares de acogida para peregrinos y militares, como el de Pérgamo. Tenían muchísima importancia social y dentro de estos edificios se producían diversas curaciones, algunas de ellas milagrosas. Se celebraban rituales mágico-religiosos, usando medicamentos, haciendo terapias psicológicas, con autosugestión, puestas en escena que influían en el ánimo de los enfermos, gimnasios, catarsis mediante música, danza o teatro, curas de sueño, procesiones e invocaciones divinas para superar enfermedades. Los mayores templos se han levantado en honor y culto a los dioses más queridos, adorados o preferidos, entre los que destacaré a Asclepio, Hygieia y Telesforo por su importancia y relación con la salud.

Asclepio era un dios griego de la curación, conocedor de las plantas. Es Esculapio para los romanos, que antes veneraban a Apolo para su salud. Claramente relacionado con los cirujanos y los médicos. Se representa con una serpiente. Hygieia o Higía es la diosa de la curación, limpieza y sanidad. Es Salus para los romanos, relacionada con la limpieza, la salud y la prevención. Se representa con una copa. Casi todos los dioses antiguos son inclementes con los hombres, que han de preocuparse ellos mismos de su propia recuperación. Por eso las prácticas de curación son mediadas por sacerdotes, médicos, magos y chamanes. Un papel muy similar al que los profesionales de la salud actualmente.

Telesforo simboliza la recuperación de la enfermedad. Protege y sana en la distancia. Completa la acción de Asclepio. Cumple los deseos de mejora. Es el salvador que lleva hasta el final. El que acompaña durante la enfermedad o hasta la muerte. Es el más humilde. Su relación con las enfermeras es evidente. Puede parecer un dios menor o secundario, representado como un niño junto a Asclepio e Hygía, que son la pareja principal, pero cuenta con templos incluso mayores y más importantes. El pequeño genio representa la renovación y suele portar un rollo, que es el libro del saber. También se le representa con una cajita, capsa, cofrecillo o arca. Se trata de un capsario, que es la caja que usaban los capsarií, especialistas ayudantes de los médicos. Se podría decir que era una especie de botiquín, con vendajes, emplastos y remedios para las heridas.

La mitología cuenta relatos para entender la vida. Muchas veces se representan conceptos abstractos o fuerzas naturales como si fueran una familia de dioses, mezclando realidad e imaginación para entender la vida misma. Salud, curación o convalecencia no son madre, hijos o hermanos en sentido literal. En cualquier caso, prefiero no reducir sus papeles divinos a conceptos delimitados como prevención, curación, limpieza, analgesia, sanidad, tratamiento, convalescencia, cirugía, partos, muerte o fiebre, sino más bien recordar que los mitos intentan explicar la realidad y por lo tanto cada persona invoca al dios más adecuado o preferido para su caso. 

 

  • López Pérez M. Los relatos milagrosos de la Estela A del santuario-médico de Epidauro.
  • López Perez M. Los Asclepiea, templos de curación y centros de peregrinación en la Antigüedad, en G. Bravo / R. González Salinero (eds.), Ver, viajar y hospedarse en el Mundo Romano.
  • López Pérez M. Los discentes capsariorum como aprendices de capsarios en el ejercito romano de época imperial. Temperamentvm 2005; 2. Disponible en </temperamentum/tn2/t0140.php> 
  • Yébenes, S. P. (2002). Telesforo de Pérgamo como» genius capsariorum valetudinarii» en el ejército romano de época imperial. In Scripta antiqua: in honorem Angel Montenegro Duque et José María Blázquez Martínez (pp. 527-532).